Diez de diecisiete concejales, representando el 61,92% de los votos emitidos en San Lorenzo, apoyaron una opción de cambio
Gobierno de perdedores. Se ha convertido en el estribillo favorito del PP a nivel nacional y de nuestro pueblo (en los plenos, panfletos, etc) cuando se quejan de no poder liderar un gobierno a pesar de ser el partido más votado. Es curioso porque, cuando no se pierde del todo, como en las últimas elecciones nacionales, y se tienden puentes a la oposición, es posible formar gobierno a pesar de no tener mayoría absoluta.
En San Lorenzo la composición del nuevo consistorio es de un equilibrio inestable, pero esas son las cartas que nos han dado los vecinos y con ellas tenemos que jugar. El PP con el 28,2% del voto y seis de diecisiete concejales lo tenía difícil para formar gobierno, pero no imposible. Su talante y forma de hacer política durante más de veinte años hizo que diez de diecisiete concejales, representando el 61,92% de los votos emitidos en San Lorenzo, apoyasen una opción de cambio y confiasen el “difícil equilibrio” a una alcaldesa de un partido políticamente neutro y sin experiencia previa en el gobierno municipal. Es la nueva política y la nueva situación en San Lorenzo que tan difícil se le hace a un partido “ganador” con el 28,2% de los votos.